Los habanos: el precio del lujo y de la extravagancia

Los habanos: el precio del lujo y de la extravagancia

Desde que el Viejo Mundo, descubrió América, se vio fascinado por un producto que para ellos era completamente nuevo: el tabaco.
Fue así como a través de los años, diversas empresas se han dedicado de manera exclusiva al arte de producir los mejores tabacos para ofrecer a sus clientes los mejores puros que existen en el mundo.

En este ámbito, los puros Cohiba, sobresalen por el extraordinario y lento proceso con el que son fabricados.

El nombre Cohiba proviene de los indígenas taínos que se refieren a los manojos de hojas de tabaco que fumaban los nativos en Cuba, la primer forma de cigarro conocida.

Los Cohiba son tan buenos porque son laminados a mano así como las hojas dentro del puro, Cohiba selecciona a mano las hojas menos venosas y con más sabor. Con sabores a pimienta, vainilla y añejados en coñac o impregnados con whisky Bourbon y aromas como canela, cedro y cacao, cuentan entre sus más fieles aficionados a personajes famosos, entre ellos, quien los dio renombre por su preferencia, el Primer Ministro Británico, Winston Churchill.

Los habanos: el precio del lujo y de la extravagancia

Los habanos: el precio del lujo y de la extravagancia
Los habanos: el precio del lujo y de la extravagancia
A tanto llega la veneración por este producto, que la empresa llega a fabricar anualmente cajas con 40 puros a $15.000 cada una, los Cohiba Behike, tienen un añejamiento de entre cinco a diez años y están numerados del 1 al 4000, sus cajas o humidores son fabricadas en ébano negro, nácar, sicomoro, cedro y hueso de buey con una placa en la que figura el nombre del propietario ya que son confeccionados a pedido, así como el número del humidor para evitar falsificaciones.

Cada puro pueden tardar hasta una hora en ser consumido. Puede encontrar versiones envueltos en oro de 24 kilates, tal como el DM 2 Gold Torpedo, con los que gastas dinero para ver el oro convertirse en humo en todo el sentido de la palabra.

Resulta importante que no olvide los cortadores, hechos de acero inoxidable y un buen encendedor que le permitirán encender sus puros aún en las condiciones más extremas.